Las mejores cosas para hacer en Albi, capital del Tarn, Occitainie

Tarn, en la región de Occitania, es uno de esos lugares de Francia que confunden a la gente. automáticamente piensan en las salvajes gargantas del Tarn, que se encuentran en Lozère, a unos 140 kilómetros al noroeste de Albi, la capital del Tarn. El río Tarn atraviesa ambos, pero ahí termina la comparación. El departamento tiene un paisaje de colinas verdes, viñedos exuberantes, pueblos bastida medievales y algunos sitios notables declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Albí

Albi está aproximadamente a una hora al oeste de Toulouse. La ciudad está dominada por la catedral Sainte-Cécile, que parece una fortaleza. Brilla de rojo temprano en la mañana, una monstruosa montaña de ladrillos, erigida entre 1282 y 1392, como una poderosa demostración de fuerza, después de que la revuelta cátara fuera finalmente sofocada.

De cerca, esta Fortaleza de Dios resulta intimidante: un búnker de ladrillo, con ventanas nada más que rendijas, coronado por la torre de ladrillo más alta de Europa, con una altura de 78 m. Es parte de la Ciudad Episcopal catalogada por la UNESCO, que también incluye la fortaleza del obispo Bernard, el Palacio de la Berbie, además de los jardines junto al río del palacio, la iglesia de San Salvi y el Puente Viejo.

Catedral de Albi

Después de la delgadez gótica de su exterior, el interior de la Catedral resulta una agradable sorpresa. La bóveda está cubierta de frescos de ricos colores, el mayor ejemplo de pintura renacentista italiana en Francia. En la parte trasera hay una enorme representación del Juicio Final. Tiene cuatro pisos de altura y ocupa todo el ancho del edificio. Fue pintado por artistas flamencos entre 1474 y 1480. Los demonios reptiles, que torturan almas tristes por la eternidad, son un severo recordatorio de la paga del pecado. Le falta el cuerpo central, derribado para dar acceso a una capilla más reciente situada en la base del campanario. Lamentablemente, eso significa que Dios, el juez del Juicio Final, ya no está a la vista.

En el otro extremo, rodeando el coro hay un biombo gótico, tallado en piedra caliza, que alberga docenas de estatuas en nichos. En la puerta central se puede distinguir a Adán tratando de cubrirse, de cara a Eva, adoptando su pose de modelo.

Antes de la Contrarreforma, el acceso a esta parte de la iglesia solo estaba disponible para el clero, excluyendo a la gente común que solo podía escuchar, pero no ver, la celebración de la misa.

Hijo de Albi – Toulouse-Lautrec

El hijo más famoso de Albi es el pintor Henri de Toulouse-Lautrec. La casa donde nació en 1864 aún existe, aunque está cerrada al público. Lo que puedes ver es una colección casi completa de sus obras en el Palacio de la Berbie, al lado de la Catedral. Cuando murió en 1901 de alcoholismo y sífilis, nadie se interesó por sus pinturas y lucharon por encontrar un hogar. Afortunadamente, uno de sus primos era alcalde de Albi en aquella época y el museo Toulouse Lautrec abrió sus puertas en 1922.

Lautrec tenía una enfermedad ósea, probablemente como resultado de la endogamia en su familia, y se rompió el fémur derecho cuando se cayó de una silla cuando tenía 13 años. Mientras se recuperaba en los Pirineos, tropezó y se rompió el otro fémur y ambos nunca sanaron por completo. Comenzó a dibujar y pintar durante largos períodos de convalecencia y se fue a París a estudiar con Bonnat y Cormon. Durante este tiempo, tuvo su primer encuentro con una prostituta y comenzó a pintar la vida baja de Montmartre.

Arte de Toulouse-Lautrec en Albi

Lo que sorprende en el museo es que realmente fue un pintor consumado. En los 240 lienzos expuestos se pueden detectar expresionistas, impresionistas, clásicos e incluso claroscuros. Probablemente influyó en Van Gogh y Picasso era un gran admirador. Hacia el final de su vida, en 1891, aprendió por sí mismo la litografía. El resultado fueron los 31 carteles del Moulin Rouge por los que es justamente famoso.

Mapamundi

Otra atracción de Albi catalogada por la UNESCO es el pergamino Mappa Mundi, que data del siglo VIII y una de las representaciones más antiguas del mundo. Perteneció a la catedral de Albi y se puede ver un facsímil en el Tesoro con paneles informativos que explican el contenido y la historia.

Rupert Parker es un escritor, fotógrafo, camarógrafo y productor de televisión. Sus intereses especiales son la comida y los viajes y escribe sobre todo, desde aventuras en la naturaleza hasta recorridos por spas gourmet. Lea sobre sus últimas aventuras en su sitio web Planet Appetite.

Información útil para Albi

Tarn Tourisme: información sobre la región; Albi Tourisme: información sobre la ciudad.
Hoteles: El hotel Mercure Cité Episcopale tiene vistas al río en Albi.
Restaurantes: El restaurante Le Lautrec ofrece comida regional frente a la casa natal del pintor en Albi; La Table du Sommelier ofrece maridajes de vinos locales con cada plato en Albi.